Un caso de Nicolás Romero
El pasado 15 de diciembre, Norma Almazán recibió la peor noticia de su vida: su hija de ocho años le dijo que su tío, quien además es su padrino de bautizo, la violó.
La niña tenía seis años, la primera vez que este hombre la agredió sexualmente.
Desde entonces vivía con temor de que esta persona le pudiera hacer daño a su mamá o a su hermano, si ella les decía algo.
Norma platica que esta revelación estalló como una bomba en la familia, pues durante más de 30 años convivieron con él de forma frecuente, pues es su cuñado.
Fue entonces que tuvo que decidir entre hacerle justicia a su hija o evitarle el dolor a su hermana y a sus sobrinos.
“Él no pensó en ellos, en su esposa y en sus hijos, cuando lastimaba a una niña inocente”, reprochó Norma.
El pasado 24 de enero, denunció penalmente a su cuñado ante la Agencia del Ministerio Público Especializada en Violencia Familiar, Sexual y de Género (AMPEVFSYG) ubicada en el municipio de Nicolás Romero.
El hombre fue detenido y vinculado a proceso, señalado como probable responsable del delito de violación equiparada.
Pero, días después se le otorgó una medida cautelar y es probable que lleve su proceso en libertad, con el uso de brazalete electrónico.
Debido a la cercanía con la casa del presunto agresor, el hogar de la víctima es resguardado por una patrulla de Protección Civil.
Norma y su familia están en espera de que inicie la etapa de desahogo de pruebas.
Y lo único que piden a las autoridades es que hagan bien su trabajo para que haya justicia.
Además, impulsan una campaña contra la violencia sexual infantil, ante los constantes casos de abuso que existen en el estado de México.
Hasta el año 2022, esta entidad ocupaba el primer lugar a nivel nacional con el mayor número de casos de violencia sexual contra niños, niñas y adolescentes.
Lo anterior, según la base de datos de la Red por los Derechos de la Infancia en México (REDIM).
De 2015 a 2022, mil 522 mujeres menores de edad fueron víctimas de violencia sexual en el estado de México.
En esos ocho años, ese delito aumentó 96 por ciento.
Los primos, tíos, hermanos o abuelos, fueron causantes del 18.3% de las agresiones sexuales contra niñas y mujeres adolescentes.
Eso de acuerdo con los registros nacionales del año 2022, que presenta la REDIM, lo cual se puede consultar aquí.